«Una oficina de Komala fue alcanzada. Yo vi al menos 12 cadáveres y
había más muertos bajo los escombros», dijo a France Presse un
habitante que escapaba de esta zona, Salé Ali.
Previamente, la cadena de televisión qatarí 'Al Yasira' informó
de 33 muertos en este ataque. El cuartel general de este grupo, una
de las principales formaciones islámicas kurdas iraquíes, situada
en las montañas del norte de Irak, fue «completamente destruido»
por estos bombardeos, que se produjeron la madrugada del viernes y
también ayer por la mañana, según fuentes de 'Al Yasira'.
Dirigentes de la Unión Patriótica del Kurdistán (PUK), un aliado
de Washington, declararon que la base del KIK, situada cerca de la
ciudad de Jormal, fue bombardeada el viernes por la noche en un
ataque que también tomó como blanco a otra organización islamista,
Ansar Al Islam.
Un responsable de un grupo islámico moderado local, el
Movimiento Islámico del Kurdistán (IMK), declaró por su parte que
había visto al menos 45 cadáveres después de un bombardeo contra
otra oficina de Komala.
De otra parte, una facción kurda que domina parte del norte de
Iraq dijo que Estados Unidos lanzó un ataque aéreo y con misiles
contra el reducto de un grupo islámico al que Washington acusa de
estar ligado con Al Qaeda.
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