Los cuerpos de los fallecidos yacían sobre la acera de la gran avenida que rodea el terreno de aviación.

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OTR/PRESS-MOSCU
Un doble atentado suicida perpetrado por mujeres kamikazes, de las cuales al menos una era chechena, y que fueron atribuidos por las autoridades rusas a los rebeldes independentistas, causó ayer la muerte de unas 20 personas durante un concierto de rock en Moscú, según la Policía, aunque el ministro del Interior redujo esa cifra a 16.

Una de ellas llevaba un documento de identidad checheno, indicó el ministro ruso del Interior, Boris Gryzlov, que se dirigió de inmediato al lugar de los hechos. Los servicios de seguridad identificaron a la kamikaze como Zulijan Lijadjieva, de 20 años, oriunda de la región de Kurtchaloi, al sureste de Grozni.

Las dos mujeres llevaban sendos cinturones con cargas explosivas de al menos 500 gramos de TNT, rellenas con bolitas de acero y otros fragmentos metálicos, según la Policía rusa. Al parecer, tras intentar entrar sin éxito por las medidas de seguridad en el aeródromo de Tuchino, al noroeste de Moscú, realizaron la acción a la entrada del mismo, activando sucesivamente sus cargas en dos lugares distintos cerca de las taquillas. Las dos mujeres kamikazes fueron «literalmente despedazadas» por las explosiones, indicó la Policía.