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Lucio del Valle, responsable general de la Agrupación de Seguridad Privada de Eivissa y Formentera de CC OO, ha remitido sendas cartas a los ayuntamientos de Eivissa y Santa Eulària y al Consell d'Eivissa i Formentera en las que advierte del peligro potencial en el que se han convertido los depósitos de Repsol, que se han quedado sin vigilancia tras su cambio de titularidad.

La factoría de Repsol Butano en Eivissa ha sido desmantelada y en la actualidad la compañía «Butanpalma» es la encargada de explotar estos depósitos, que se encuentran cerca de dos gasolineras en la carretera de Eivissa a Santa Eulària. La cercanía de los depósitos a núcleos poblados «hace aun más criticable el hecho de que la nueva empresa los haya dejado sin vigilancia», dice el sindicato. Según CC OO las medidas de seguridad serán «totalmente nulas» ya que la política de la nueva empresa explotadora pasa «por reducir gastos, suprimiendo no sólo la seguridad física sino también los sistemas de seguridad existentes en la actualidad como son el sistema contra incendios y escapes, que consiste en un depósito que suministra agua a las bombas contra incendios», un mecanismo que debe activar el vigilante y «que va a quedar totalmente anulado».