Cuatro guardias nacionales fueron asesinados ayer por grupos
extremistas y un ciudadano de nacionalidad libanesa-estadounidense
fue secuestrado en Irak, en el día en que Hungría anunció la
próxima salida de su Ejército del país árabe.
A primera hora de la mañana saltaba la noticia de la
decapitación de un ciudadano iraquí al que se identificó como un
«oficial de alto rango» de las nuevas Fuerzas de Seguridad de
Irak.
En un comunicado colgado en una página web, la agrupación «Yish
al-Ansar al-Sunna» (Ejército de los Seguidores de la Sunna) explica
que Husein Shunun fue capturado cuando participaba, junto a
soldados estadounidenses, en una operación militar en la ciudad
septentrional de Mosul.
Otra organización hasta ahora desconocida, las «Brigadas de los
Honorables de Irak», reivindicó horas después en un vídeo emitido
parcialmente por la televisión qatarí «Al Yazira» el asesinato de
tres guardias nacionales iraquíes acusados de «espiar» para las
fuerzas estadounidenses en Irak.
En Bagdad, el coronel Maan Jalaf, portavoz de la policía,
revelaba ayer que hombres armados se presentaron en un inmueble del
barrio bagdadí de Al-Mansur y secuestraron, a punta de pistola y
sin disparar un solo tiro, a Radiq Sadiq, empleado de una
constructora estadounidense en Irak.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.