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El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón cuantificó ayer en casi 1.500 millones de euros la responsabilidad civil del ex dictador chileno Pinochet por los delitos de genocidio, terrorismo y torturas por los que está procesado en España.

El pasado 27 de enero, el banco llegó a un acuerdo con el Departamento de Justicia de EEUU por el que reconoció haber cometido un delito al no informar a las autoridades de transacciones que apuntaban al lavado de dinero de Pinochet y aceptó pagar una multa de 16 millones de dólares.

El juez fijó en 1.445,5 millones de euros -cantidad estimada por la acusación popular y aceptada por la Fiscalía- la responsabilidad civil de Pinochet por los delitos por los que lo procesó en diciembre de 1998, según un auto notificado ayer.

En el auto, el magistrado dispuso, además, el sobreseimiento de la causa por alzamiento de bienes y blanqueo de dinero contra el Riggs National Corporation de EEUU, en el que Pinochet había ocultado 10 millones en cuentas secretas.

Además, el banco alcanzó otro acuerdo con la acusación popular y particular en España para la entrega de información sobre las cuentas de Pinochet y de ocho millones de dólares a la Fundación española Presidente Allende para su distribución entre las víctimas de la dictadura.

La acusación desistió, por tanto, de la querella contra el banco y pidió el sobreseimiento y archivo definitivo de las diligencias. El Ministerio Fiscal se mostró conforme con el sobreseimiento.

Garzón recoge en su auto los acuerdos alcanzados por el Riggs, concluye que no había en los responsables del banco «intención dolosa» de cometer los delitos imputados y constata su cooperación con la Justicia «facilitando el hallazgo de bienes» de Pinochet y de su esposa, Lucía Hiriart.