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EFE-ANKARA/ROMA
Un tribunal turco decidió ayer poner en libertad al terrorista turco Mehmed Alí Agca que disparó e hirió al papa Juan Pablo II en 1981 en Roma, informó ayer la agencia de noticias semioficial Anatolia. Según la fuente, el tribunal decidió liberar a Agca en los próximos días tras considerar que ha cumplido ya su pena de cárcel en Turquía.

La decisión fue tomada después de que los responsables de la prisión Kartal, en Estambul, enviaran un mensaje al tribunal, en el que aseguraban que había cumplido la pena que se le impuso, explicó la agencia. Agca, nacido en enero de 1958, puede ser puesto en libertad entre el 10 y 15 de enero, añadió.

Agca, acusado en Turquía de haber asesinado en 1979 al periodista turco Abdi Ipekci, disparó e hirió el 13 de mayo de 1981 al papa Juan Pablo II en la plaza de San Pedro, y fue condenado a cadena perpetua en Italia.

Tras cumplir unos 20 años de la pena en Roma, fue indultado y extraditado a Turquía en junio del año 2000. Juan Pablo II había manifestado su perdón a Agca, a quien visitó en 1983 en la cárcel romana de Rebbibia, donde en esos momentos estaba preso el turco.

El portavoz de la Santa Sede, Joaquín Navarro Valls, afirmó anoche que la cuestión de la excarcelación de Alí Agca es «un problema de naturaleza jurídica». En una nota difundida poco después de conocerse la decisión de las autoridades turcas, Navarro Valls dijo haber conocido la noticia a través de las agencias de prensa.

El portavoz precisó que «la Santa Sede frente a un problema de naturaleza jurídica se remite a las decisiones de los tribunales implicados en este caso».

Mehmed Alí Agca nació en un suburbio de la provincia turca de Malatia en 1958, en el seno de una familia humilde. Agca, que de niño se ganaba la vida vendiendo agua y recogiendo restos de carbón en las estaciones de trenes, estuvo posteriormente vinculado a organizaciones turcas de extrema derecha, como los Lobos Grises, dependientes del partido turco Movimiento Nacional organizado por el coronel Aspaslan Turkes, de donde pasó a formar parte de grupos terroristas palestinos.

Después de cometer varios delitos en Malatia se fue a Estambul, donde con documentos falsos se matriculó para realizar estudios superiores. El 1 de febrero de 1979 se le atribuyó el asesinato del periodista liberal turco Abdi Ipekci, director del diario «Milliet».