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AGENCIAS-LA PAZ
El Decreto Supremo 'Héroes del Chaco' nacionaliza los recursos petrolíferos de Bolivia, pero, por las declaraciones del presidente Evo Morales, parece que las dos principales operadoras, la brasileña Petrobrás y la hispanoargentina Repsol YPF, tienen todavía posibilidades de prosperar. «Las petrolíferas que quieren negociar serán bienvenidas si se subordinan a las leyes bolivianas», garantizó ayer Morales, al tiempo que advirtió que no modificará el decreto bajo ninguna circunstancia.

La situación de incertidumbre generada en el ámbito internacional incluso dio lugar ayer a la intervención del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, que, según dijo, telefoneó al presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, así como a los de Brasil, Luis Inacio 'Lula' da Silva y Argentina, Néstor Kirchner. Chávez afirmó que había querido tranquilizó a los mandatarios transmitiéndoles su confianza en Morales: «Evo sabe lo que hace».

En sendas entrevistas a la cadena Venezolana Telesur y a la CNN en español, el presidente de Bolivia desmintió ayer las informaciones que apuntan que el Gobierno del país andino confiscará los activos de las empresas transnacionales petroleras con el decreto de nacionalización de hidrocarburos. «No hay expropiación de bienes, el control absoluto corresponde al Estado y los bienes seguirán siendo de las empresas petroleras, pero ya no será como antes que ellos ganaban el 82% mientras que Bolivia se quedaba el 18 o el 13%», explicó.

«Es una decisión por la soberanía del país, es el derecho de propiedad sobre nuestros recursos naturales. Necesitamos socios, no patrones ni dueños. Por tanto, las empresas que respeten las leyes bolivianas, que se subordinen a las leyes bolivianas, bienvenidas», señaló Morales en referencia a la petrolera brasileña Petrobras y la hispanoargentina Repsol YPF.