TW
0

KATY SELEME-BEIRUT
El general François al Hajj, director de operaciones militares y candidato a sustituir a Michel Sleiman al mando del Ejército libanés en caso de que este fuera elegido presidente de la República, murió ayer en un atentado con coche bomba en Beirut. Al Hajj, cristiano maronita de 54 años, y uno de sus guardaespaldas murieron por la explosión de un coche bomba al paso del vehículo en el que se trasladaba en el barrio de Baabda, al este de Beirut.

La explosión se produjo cinco minutos después de que el general abandonara su domicilio en la zona de Sibia, rumbo a su oficina del ministerio de Defensa, situado en una de las zonas más protegidas del Líbano. La Agencia Nacional de Noticias libanesa (ANN) señaló que el cuerpo de Al Hajj fue despedido 150 metros fuera del coche por la fuerza de la explosión y encontrado posteriormente en un agujero en el suelo causado por una bomba israelí lanzada durante la guerra del verano del 2006.

Hajj fue descrito por un ex responsable del Ejército, citado por la emisora LBC, como uno de los oficiales más importantes de las Fuerzas Armadas, que desempeñó un papel esencial en el despliegue de las tropas libanesas en el sur del país tras la guerra del verano de 2006 entre Israel y el grupo chií Hizbulá. Según algunos oficiales del Ejército, Hajj, considerado el 'número dos' del Ejército, coordinaba también las operaciones de la FINUL (fuerza de la ONU) en el sur del Líbano y era el principal candidato para suceder al comandante en jefe del Ejército, Michel Sleiman, en caso de que éste fuera elegido presidente del país.