La construcción de nuevas viviendas en EEUU aumentó un inesperado 22'2% en febrero respecto a enero, tras sucesivas caídas en los meses precedentes, según informó ayer el Departamento de Comercio.
Las cifras revisadas correspondientes al mes de enero indican que la construcción cayó a un ritmo de 477.000 unidades, una cifra que mejora la publicada inicialmente pero que todavía marca un récord mensual a la baja.
Las solicitudes de permisos de construcción, considerado un signo fiable de la actividad en el futuro, también aumentaron en febrero un 3 por ciento a una tasa anual de 547.000 viviendas, mientras que los expertos esperaban un descenso de 500.000 unidades. No obstante, pese al incremento de la actividad en febrero, la construcción de viviendas ha bajado un 47'3 por ciento en los últimos doce meses.
La vivienda es un indicador clave del que marca el pulso de la salud económica del país y el retroceso en este sector es otra de las consecuencias de la recesión económica que vive Estados Unidos por segundo año consecutivo.
Al hilo de las turbulencias creadas por el colapso del sistema financiero estadounidense, Miembros del Congreso propusieron ayer imponer un recargo tributario a los bonos de ejecutivos de la aseguradora American International Group Inc (AIG), en medio de una ola de rabia por los grandes pagos realizados.
Gary Peters, representante demócrata, presentó un proyecto en la Cámara de Representantes para imponer una sobretasa de un 60 por ciento a bonos superiores a los 10.000 dólares en cualquier compañía en la que el Gobierno de Estados Unidos posea un 79 por ciento o más.
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