Rosa Estaràs fue la única eurodiputada popular que votó en contra de seguir viajando en primera clase y a favor de congelarse el sueldo. | Joan Torres

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«Estoy contenta de haber votado para que los eurodiputados vuelen a partir de ahora en clase turista. El informe que votamos en el Parlamento Europeo no es vinculante, pero estoy convencida de que en la votación definitiva todo el grupo popular defenderá la misma línea», señaló la mallorquina Rosa Estaràs, que se desmarcó de su grupo y apoyó una propuesta para que los eurodiputados vuelen en clase turista.

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En cambio, la mallorquina Teresa Riera, del grupo socialista, alegó que su voto en contra a la propuesta de viajar en clase turista había sido un error. «En un trayecto corto no tiene sentido ir en primera clase y sólo se justifica que lo hagan aquellos eurodiputados con problemas de movilidad. Lamento muchísimo haber votado en contra de la propuesta de viajar en clase turista, un error que se produce debido a la complejidad de las votaciones», se justificó la eurodiputada mallorquina en declaraciones la Cadena Ser. Sobre este asunto, el presidente Antich recordó que en octubre de 2010 viajó en clase turista a Panamá para firmar un convenio de colaboración con el Ejecutivo de ese país y «no pasó absolutamente nada», ya que, según ha señalado, pudo hacer toda la visita programada y volver a Baleares «bien tranquilo».


Para el presidente del Ejecutivo autonómico, en unos momentos en los que las instituciones deben aplicar «austeridad», deberían, a su juicio, dar «apoyo» a este tipo de iniciativas, como la presentada por un eurodiputado portugués para limitar los vuelos en clase business.