Un soldado de la armada italiana monta guardia cerca del Coliseo, en Roma, tras el incremento de las medidas de seguridad. | CLAUDIO PERI

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El ministerio italiano del Interior comunicó la expulsión del país de un tunecino de 23 años que «había manifestado claros signos de radicalización» y que «había recibido instrucciones para cometer un atentado en Italia».

El ministerio explicó en un comunicado que el sujeto, residente en la provincia de Brescia (norte de Italia) fue expulsado hoy en un vuelo que ha partido desde el aeropuerto romano de Fiumicino con destino a Túnez.

La decisión se ha tomado después de que las investigaciones policiales evidenciaran que el ciudadano mantenía relación a través de las redes sociales con un combatiente extranjero de origen marroquí con residencia también en el norte de Italia, según la nota remitida a los medios.

El ciudadano tunecino había regresado a Italia el pasado 15 de agosto después de permanecer un largo periodo en su país y «había manifestado claros signos de radicalización».

Además, las investigaciones han determinado que «a mitad de noviembre de 2016 había recibido indicaciones de una persona conocida para cometer atentados en Italia similares a los perpetrados en Francia y en Bélgica».

El expulsado también «había mostrado intenciones de abandonar Italia lo antes posible para unirse al (grupo terrorista) Estado Islámico».

Con esta son 132 las expulsiones realizadas por el Gobierno italiano desde enero de 2015, de las que 66 se han llevado a cabo desde enero de 2016.