Una cincuentena de vecinos de sa Calatrava se concentraron ayer en
las calles del barrio para protestar por la «dejadez» con la que el
Ajuntament trata a esta zona de Palma. Los vecinos se quejan de que
camiones de gran tonelaje entran en el barrio para realizar las
obras del Pla Mirall, pero debido a su peso destrozan el pavimento
de la zona, recién remodelado.
El presidente de la Asociación de Vecinos, Climent Garau,
aseguró que se está inclumpiendo la normativa, ya que estos
camiones de gran tonelaje no deberían entrar en un barrio tan
característico. Los vecinos mantendrán el lunes una reunión con la
constructora para ver si es posible cumplir la normativa. Los
vecinos del barrio quieren además reunirse con el teniente de
alcalde de Mantenimiento, José María Rodríguez, para mantener con
él un intercambio de impresiones y solicitarle que haga cumplir la
normativa.
Además de estos problemas ocasionados por las obras del Pla
Mirall, los vecinos denuncia la total dejadez del Ajuntament en las
funciones de vigilancia nocturna. Los vecinos creen que las obras
se están haciendo con una falta absoluta de coordinación y aseguran
que la zona de Dalt Murada se encuentra ocupada de forma permanente
por parte de las empresas constructoras, que utilizan este espacio
como si fuera un almacén con el agravante de que destrozan las
protecciones de la propia Murada.
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