El alcalde de Palma, Joan Fageda, y el president del Govern, Jaume Matas, visitaron ayer las obras. Foto: JAUME ROSSELLÓ.

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El alcalde de Palma instó ayer a la arquitecta del proyecto del Parc de ses Estacions, Carmen Pinós, a estudiar algún sistema que convierta en accesible para personas minusválidas la pasarela que atraviesa el ancho del parque, comunicando las calles Eusebi Estada y Marqués de la Fuentsanta. En principio, la opción más viable, según la responsable de la obra, y que parece que va a ponerse en práctica, es la instalación de unas plataformas elevadoras que se situarían a ambos márgenes de la pasarela, justo donde acaba la escalinata, a la altura donde comienza el puente.

Joan Fageda acompañó ayer al presidente del Govern balear, Jaume Matas, en la visita que realizó a las obras de construcción del Parc de ses Estacions. En su recorrido, ambos mandatarios estuvieron acompañados por el concejal de Urbanismo, Carlos Ripoll, la arquitecta del proyecto, los responsables técnicos del Ajuntament y los directivos de la empresa constructora.

Las obras de este nuevo espacio público prosiguen a un ritmo frenético y también se acumulan las quejas de los vecinos de la zona por los trabajos nocturnos que tienen lugar de lunes a domingo y que ya han motivado una denuncia por parte de la Policía Local. Todo para lograr que el próximo día 26 esté finalizada la primera fase del parque. Ese es el compromiso adquirido por la empresa, aunque queda descartada la organización de una inauguración oficial antes de las elecciones, como en un principio se anunció. En su lugar, se ha pensado en celebrar una jornada de puertas abiertas para toda la ciudadanía el día 28 o 29 de mayo.

Una vez casi acometida la obra arquitectónica, el sábado se comenzará a sembrar el césped, que ocupará buena parte del espacio, y acto seguido las plantas de temporada, de las que se plantarán 55.000. Este proyecto, como explicó ayer Carmen Pinós, está pensado mucho desde el color, el que aportará la diversa vegetación agrupada a conciencia. Pero en algunos casos habrá que esperar bastante, pues, por ejemplo, la parra virgen que deberá arropar las pérgolas tardará años en crecer lo suficiente, hasta una década en el caso de la de mayor tamaño.