Entre vítores, la presidenta de Unió Mallorquina levantó su copa de
cava para brindar por lo que ayer, a las 2'30 de la madrugada, con
casi el cien por cien del escrutinio, se consideraba un éxito. A
esa hora, Maria Antònia Munar, cabeza de lista de UM al Parlament
de les Illes Balears, compareció ante los medios de comunicación
entre los aplausos de los afiliados, felicitó al partido porque ha
sido el único que ha crecido y ha pasado de tener 5'3 a 7'3 en las
Illes Balears, «lo cual es más meritorio, porque sólo nos
presentábamos en la circunscripción de Mallorca, que ha pasado de
tener 5'5 a un 9%».
Tras nombrar todos los pueblos y ciudades donde UM ha logrado
candidatos: Palma, Felanitx y sa Pobla, entre otros, y dar los
aumentos espectaculares, respondidos con aplausos, Maria Antònia
Munar dijo tener cierta decepción por no haber logrado el segundo
concejal en Palma, cosa que Munar lo atribuyó a irregularidades
detectadas, por lo que no se descarta impugnar la votación de
Palma.
«El éxito conseguido ha sido una tarea difícil, porque nos hemos
tenido que enfrentar con una estructura de poder en el Govern y
Ajuntament de Palma, que ocupan mucho espacio en los medios de
comunicación y hemos tenido que hacer una labor de boca en boca y
casa en casa».
En cuanto a los pactos, señaló que «es muy importante tener en
cuenta quiénes son los partidos, a quién se ha votado y de dónde
vienen los votos. Después de unos días de reflexión, lo
anunciaremos».
Por el caso de Formentera, Munar dijo que «ha sido un justo
castigo a su perversidad e inmoralidad, así como un abuso de la
Ley».
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