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Con sonrisa seductora y muy simpático llegó ayer a Mallorca Pierce Brosnan. El auténtico «agente 007» sorprendió a todos, a la salida de vuelos privados de la aeropuerto de Son Sant Joan, afirmando que «no era mi sueño ser James Bond». Derrochando atractivo, Brosnan no quiere llegar a los 50 años siendo el «agente 007». «No quiero "comenta" que la gente me encansille en el papel de James Bond. Quiero dar vida a otros personajes, por lo que quizás la próxima película como Bond sea la última, ya que el rodaje durará unos 18 meses».

Su mujer, Kelly Shaye-Smith, y su hijo, Dylan Thomas, de tres años de edad, acompañan al actor en casi todos sus desplazamientos, pues para él «la familia es muy importante».

Pierce Brosnan disfrutará de unas merecidas vacaciones en Mallorca durante cinco días. Junto al actor han llegado algunos amigos, familiares y dos escoltas, además de 35 maletas de todos los tamaños.

El actor y todo el grupo llegó al hotel La Residencia de Deià al mediodía de ayer y, tras dar un vistazo a algunas de las instalaciones, piscinas, jardines, restaurante, etc., se mostró satisfecho con el hotel, propiedad de Richard Branson. La tranquilidad y el bello paisaje del pueblo de Deià son para el actor imprescindibles para pasar unos días de descanso. También aprovechará para salir a navegar con los amigos.