Las centrales lecheras de Mallorca han pactado bajar el precio de
la leche a pagar a los ganaderos sobre unas cinco pesetas. La
crispación es la nota predominante entre los payeses que ya han
recibido una notificación de la bajada del precio por parte de su
correspondiente central lechera. Las bajada se ha pactado entre las
2 pesetas en el precio base y unas penalizaciones más fuertes que
dependen de la calidad del producto. Entre las dos cosas se llega a
una bajada de 5 pesetas.
El conseller d'Agricultura, Joan Mayol, está mediando con las
empresas lácteas para que no apliquen la medida que significará un
fuerte revés para las explotaciones ganaderas. Joan Mayol explicó
ayer a Ultima Hora que «he hablado con las
centrales y me han asegurado que esta bajada de precio se congelará
como mínimo hasta enero».
A pesar de las palabras del conseller los ganaderos no lo ven
nada claro porque de percibir 43 pesetas por litro los ganaderos
pueden pasar a las 38 pesetas e incluso en algunos caso más. «Si se
aplica esta medida no quedará ninguna ganadería en Mallorca»,
afirmó un ganadero de Felanitx.
A principios de este mes de septiembre los responsables de
Agama, Piris, Grimalt y Montes, que son las centrales lecheras y
queseras de Mallorca, se reunieron y pactaron la bajada del precio
base en unas 2 pesetas. Asimismo decidieron aplicar penalizaciones
por células somáticas inhibidos y bacteriología. Esta decisión,
según argumentaron las centrales a los responsables del Govern, se
debe a cuestiones económicas y del mercado.
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