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Los centros sanitarios de Balears han percibido en lo que va de año un aumento de las asistencias a partos con respecto al año anterior, lo que se traduce en un incremento de los nacimientos. Según los datos extraídos de las metabolopatías realizadas a los recién nacidos por la Conselleria de Sanitat i Consum del Govern de les Illes Balears, con una cobertura aproximada del 99 por ciento, entre enero y agosto de 1999, estas pruebas se han efectuado a 5.655 neonatos, mientras que en el mismo período del año pasado se llevaron a cabo a 5.273. Al final del año pasado, se contabilizaron 8.099 recién nacidos, y desde la Conselleria de Sanitat se estima que al acabar 1999 el número de nacimientos puede situarse entre los 8.600 y 8.700, lo que significa alrededor de 600 nacimiento más que el año anterior.

Consultados distintos centros hospitalarios de Mallorca, todos coinciden en que a lo largo del año se está registrando un incremento del número de partos. La doctora González, responsable de partos del Hospital de Son Dureta, explicó que en lo que llevamos de año el incremento se ha detectado en meses concretos: marzo, abril, julio, agosto y lo que llevamos de septiembre, en torno a unos 40 más cada mes con respecto a los mismos meses del año anterior. De enero a agosto de 1999, se han registrado en Son Dureta 1.993 nacimientos, frente a al mismo período del año pasado que tuvieron lugar 1.784. En la clínica Rotger, en lo que va de año se han asistido 694 partos, frente a los 685 del año anterior. Por último, en la Policlínica Miramar, que no disponía datos del acumulado hasta agosto de este año, señalan que desde 1996 se viene percibiendo un ligero aumento de los partos en este centro sanitario, pasando de los 1.349, en 1996, a 1.449 en 1997 y, de éstos a 1.463, en 1998.

Aunque todavía es pronto para que los centros sanitarios perciban un incremento de los embarazos por el denominado «efecto 2000», en algunas consultas ginecológicas privadas de Mallorca sí que se ha detectado este aumento, «algunos buscados de forma premeditada para que los alumbramientos se produzcan en los primeros meses del 2000». En cuanto al incremento del número de nacimientos detectado en Balears en los nueve primeros meses del año, no se puede hablar de un aumento de la natalidad sin conocer si el crecimiento de la población se mantiene estable o la población de mujeres en edad reproductiva ha crecido en las Islas en la misma proporción que los nacimientos. En todo caso, los demógrafos hablan de un ligero despunte, pero muy bajo, que sólo varía en décimas.

Este despunte mínimo en la cifra de nacimientos puede ser debido a la bonanza económica, derivada de la bajada de los tipos de interés y de la carga fiscal, lo que ha hecho que muchas parejas se hayan planteado tener hijos al verse más desahogados económicamente. Los demógrafos consideran que para determinar si el aumento de nacimientos es significativo es preciso analizar los flujos migratorios en las Islas y, en el caso de la inmigración, su influencia en el crecimiento de la población.