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El Govern amenaza con acusar ante el Tribunal de Defensa de la Competencia por «actitudes monopolísticas» a los operadores de carburantes que trabajan en Balears: Cepsa, Campsa, BP y Repsol además de a la Compañía Logística de Hidrocarburos, (CLH), si éstas no explican, de forma satisfactoria, por qué los pescadores de las Islas tienen que pagar más por el carburante que los pescadores de la Península.

El Ejecutivo, basándose en un estudio realizado por la Direcció General d'Economia, señala que los pescadores isleños tienen que hacer frente a un sobrecoste en comparación con otras flotas y, para conocer la versión de los operadores, los ha convocado para reunión en los próximos días.

En dicha reunión el Govern preguntará a los operadores por qué el precio del gasoil en las Islas ha sido, durante este año, 8'27 pesetas superior a la media de precios peninsular, diferencia que provoca un «sobrecoste» para la flota local de 125 millones de pesetas.

Sampol destacó, durante la presentación del estudio, que para los pescadores el gasoil representa el 50% de sus costes de producción lo que significa que «el pescado de nuestra flota sufre un incremento de un 18% sobre el precio del producto de otras flotas».

El vicepresidente del Govern señaló que no aceptará la excusa habitual de los operadores relativa a los costes de transporte ya que, según sus estimaciones, dicho coste asciende «a 40 céntimos por litro» y no está justificado «un aumento en el precio en algunos casos de ocho pesetas».