Las manifestaciones contra la política del Govern del PP proliferaron poco antes de las elecciones autonómicas.

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El Pacte de Progrés no quiere caer en los errores que denunció en materia de contratación de personal cuando gobernaba el PP y pese a la necesidad que tiene de recursos humanos mantiene prácticamente congelada la entrada de nuevos trabajadores en la Administración. No obstante, en casos puntuales y debido a la necesidad acuciante de personal ha optado, en lugar de contratar interinos, por contratos privados temporales.

Pese a las continuas peticiones de las conselleries de personal la contratación está prácticamente congelada. Todo depende de lo que digan los jueces sobre las oposiciones convocadas por el anterior Govern y que fueron recurridas por CC OO y UGT. Un pronunciamiento favorable a los sindicatos abriría las puertas al Govern a convocar ya en noviembre el bolsín de interinos con que nutrir la falta de personal en tanto se convocan oposiciones (en el primer semestre del próximo año). Si los jueces determinan que las oposiciones son legales "algo que parece muy poco probable en vista de las últimas sentencias" sería un jarro de agua fría para el Govern.

La actual carencia de personal en la Administración sería consecuencia de diferentes factores y uno de ellos sería la puesta en marcha de las nuevas conselleries si bien todavía no se han creado formalmente. Según han señalado fuentes del propio Govern una de las cuestiones que más les ha llamado la atención a su llegada ha sido la gran cantidad de personal administrativo que existe en las conselleries que imputan al «enchufismo», al «amiguismo» e incluso a «queridas» de antiguos altos cargos y, por el contrario, la carencia de técnicos como pueden ser inspectores.

Al parecer las irregularidades en materia de contratación en la etapa del PP han sido varias y diversas según los sindicatos y el propio Govern que ha abierto una investigación interna y última un listado de trabajadores que llevará ante la Fiscalía.