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El dirigente del PSC-PSOE, Narcís Serra, aseguró ayer en Palma que el modelo del Pacte de Progrés ha sido una experiencia positiva para Balears pero mostró sus reservas acerca de la posibilidad de «exportar» este modelo a otras comunidades autónomas. «La situación de Balears es muy específica de aquí, y otras iniciativas, como se ha hecho en Cataluña, también han sido positivas», comentó el ex vicepresidente del Gobierno durante el mandato socialista. El ex vicepresident del Gobierno participaba ayer en la Escola de Tardor, unas jornadas convocadas por los socialistas de Balears para debatir el nuevo marco institucional de las comunidades autónomas y, específicamente, de la balear.

En su opinión, la experiencia de Balears ha consolidado a Francesc Antich como president «y como figura capaz de devolver la ilusión a los ciudadanos de Balears sobre su capacidad de autogobierno». Sobre esta consolidación de autogobierno de las comunidades autónomas, Narcís Serra defendió la necesidad de acometer una «lectura federal» de la Constitución.

Consideró que esta lectura implica una reforma del texto constitucional pero en un sólo aspecto: conseguir que el Senado se convierta en la auténtica Cámara de representación autonómica. «La Constitución todavía está abierta y permite que se pacten avances consensuados en muchas direcciones por lo que la reforma del texto constitucional sólo debe afectar a lo referido al Senado», añadió.

El dirigente socialista aprovechó su comparecencia ante los medios de comunicación para manifestar su «enorme sorpresa» por la decisión del juez Garzón de solicitar si Felipe González debe ser imputado en el «caso Oñaederra», uno de los perpetrados por los GAL. Para Serra, el Tribunal Supremo «sabrá poner las cosas en su lugar».

Al respecto, el ex vicepresidente consideró que los ciudadanos españoles tienen que preguntarse por qué todos los procesos van tan lentos pero aquellos que afectan al PSOE «renacen» cuando se acercan elecciones.

En esta línea se mostró especialmente preocupado por el hecho de que, una semana después de que el portavoz del PP, Luis de Grandes, amenazara con la posibilidad de que González fuera imputado, se haya producido la confirmación por parte del juez Garzón.