El ministro de Turismo de México, Óscar Espinosa, se mostró ayer en
Palma favorable de que el grupo Sol Meliá, que preside Gabriel
Escarrer, pueda construir su hotel en la zona de Xel-ha, en plena
Riviera Maya, «para lo cual hemos realizado un estudio de impacto
ambiental en el que se repasan las medidas que habría que adoptar
para que la construcción del complejo sea posible y satisfacer las
demandas de los ecologistas».
Espinosa realizaba ayer estas declaraciones en Palma momentos
antes de ser recibido en audiencia por el presidente del Govern,
Francesc Antich y minimizaba de este modo los problemas que
Escarrer tiene en estos momentos en la Riviera al intentar
construir su hotel en una zona protegida y de desove de la tortuga
blanca. Espinosa anunció que mantendría un contacto directo con
Escarrer para buscar una solución.
La visita a Palma, según comentó, «responde a un esfuerzo más
por acrecentar las relaciones entre México y esta comunidad con
tanto prestigio por sus servicios turísticos. En el período
1995-1999 las inversiones hoteleras han superado los 165.000
millones, superando las 14.000 camas».
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