TW
0

El Consell de Mallorca convocó ayer a regidores y técnicos de medio ambiente de todos los ayuntamientos de Mallorca para analizar en una jornada técnica las ventajas e inconvenientes de la recogida selectiva de residuos. Miquel Àngel Borràs, presidente de la Comissió de Medi Ambient en el Consell, informó a los ayuntamientos que la normativa comunitaria obliga al reciclaje de los residuos a partir del 1 de enero de 2001. «Eso nos obliga a hacer un esfuerzo importante en 2000. Es evidente que hay que eliminar los vertederos incontrolados (hay 300 contabilizados) y reciclar los residuos para reducir el funcionamiento de la incineradora», dijo.

Mallorca está en estos momentos a la cabeza de las comunidades en la recogida selectiva de residuos sólidos, pero no cumplirá los plazos marcados por la UE. «Ahora nos encontramos en una situación difícil; hay demasiada basura que origina problemas graves», subrayó Borràs, quien destacó que es preciso tener en cuenta las basuras que generan los turistas. En este sentido, ponentes de Calvià y Alcúdia expusieron su experiencia en la recogida selectiva, en la que participan los empresarios turísticos y comerciantes.

A juicio de Borràs, no es que ahora se genere más basuras sino que las soluciones que se aplicaban «no eran las más idóneas ni ecológicamente ni sanitariamente; siempre se han aplicado soluciones de emergencia y la iniciativa privada no ha sido capaz de dar una solución».