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El alcalde de Palma firmó ayer un decreto que permitirá a los conductores que sean multados por alguna infracción circulatoria evitar el pago de la misma asistiendo, a cambio, a una sesión formativa de seguridad vial. Así lo anunció ayer el teniente de alcalde de Governación, José Manuel Sierra, quien aclaró que «hace falta cumplir un requisito, el de que al conductor no se le haya impuesto, por parte del Ajuntament, ninguna otra sanción por infracción de tránsito a lo largo del último año natural -a contar a partir de la entrada en vigor del decreto- y que, además, la tramitación de la multa esté en periodo voluntario».

Es decir, que sólo se podrá evitar de este modo el pago de una multa por año «pues la idea es favorecer a los conductores que normalmente respetan las normas, pero a los que se multa varias veces al año, ya no es casualidad o confusión». En concreto, esta iniciativa va dirigida a «conductores normales y sobre todo a los jóvenes conductores de ciclomotores que, desgraciadamente, no están obligados a pasar por ninguna escuela o academia y, a menudo, su conocimiento de las normas de tráfico es escaso», explicó el edil.

La alternativa que se propone es la asistencia -libre y voluntaria- a una sesión formativa de dos horas, los jueves de 19.00 a 21.00 horas, o bien a dos sesiones de una hora cada una, los miércoles y jueves de 20.00 a 21.00 horas, en las dependencias de la Escuela de la Policía Local.

Sierra reconoció que «se trata de una experiencia novedosa, tan sólo el ayuntamiento de Barcelona realiza algo parecido, tendente a promover la concienciación y sensibilización ciudadana sobre la necesidad de respetar las normas de circulación, reforzando, al mismo tiempo, el conocimiento sobre sus aspectos esenciales».

Las infracciones contempladas por esta iniciativa van de las 5.000 a las 30.000 pesetas. Entre las leves figuran: estacionar en un lugar prohibido o reservados a taxis o a otro tipo de vehículos, conducir sin atención permanente, no emplear el casco por parte del pasajero, no respetar la línea longitudinal continua, circular sobre una zona de viandantes y aparcar sin respetar la señal de tiempo limitado.

Las infracciones graves acogidas son saltarse un semáforo en rojo por parte de un ciclomotor, ir dos en la moto, no utilización del casco por parte del conductor de la moto, producir fuertes ruidos, estacionar el vehículo en doble fila, en lugar prohibido en zona VAP, sobre la acera o acupando el carril de circulación. Todas ellas sancionadas con 15.000 pesetas.