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La ciudad de Palma arrastra toda una serie de proyectos, unos de gran calibre y otros más modestos, cuya ejecución supondrá un revulsivo para la capital balear, tanto que alterará significativamente su actual fisonomía. En algunos casos la espera se remonta a muchos años atrás; un claro ejemplo es la «cuña verde». Aunque el Gobierno municipal ha prometido que el 2000 volverá a ser un año de grandes proyectos, algunas de estas realizaciones previstas no tienen garantizado su inicio a lo largo de los próximos meses.

Es el caso, por ejemplo, de las obras de remodelación del Moll Vell, que podrían acometerse, o al menos comenzarse, este año o bien demorarse hasta próximos ejercicios. Como se recordará, el pasado año se convocó un concurso de ideas que fue declarado desierto. Un dato a tener en cuenta es que el presupuesto municipal para el año 2000 contempla un aumento del 900 por ciento de la dotación de la partida de Proyectos y Estudios del área de Urbanismo. Una partida que en 1999 estaba dotada con mil pesetas, este año dispone de 263.499.000 pesetas.

Este dinero será invertido, principalmente, en la realización de los proyectos de la primera fase de la «cuña verde». En efecto, éste será el año que marque el inicio del proceso para la ejecución de este ambicioso plan. El primer paso son las expropiaciones y ya están en litigio las del canódromo y la fábrica de zumos Zuic, por ejemplo. A continuación se estudiará el proyecto existente para saber si hay algo aprovechable y, probablemente, se convocará un concurso público para acometer las obras, aunque los trabajos propiamente dichos puede que no lleguen a comenzar antes del 2001.

Otra realización garantizada es la segunda fase del proyecto del Parc de ses Estacions, consistente en el soterramiento de las Avenidas para integrar la Plaza de España en el conjunto del parque y la construcción de un aparcamiento subterráneo bajo la nueva vía de circulación. Aunque, las obras ya arrastran un considerable retraso por culpa de la empresa adjudicataria, que se muestra reticente a cumplir las condiciones que exige el Ajuntament. Otros estudios previstos son los de la primera fase del proyecto del Baluart del Príncep y de la primera línea de es Jonquet.