El Ajuntament de Palma ha decidido que sólo los autobuses de la EMT
y los taxis podrán transitar por las Avenidas durante las obras de
soterramiento de la vía a la altura de la Plaça d'Espanya.
De modo que, a partir del inicio de los trabajos en el mes de
septiembre las Avenidas permanecerán cerradas para el vehículo
privado, salvo en momentos ocasionales, en los que sí se permitirá
la circulación de cualquier coche, según fuentes municipales. Con
esta decisión, se pretende evitar que «los dos carriles que
permanecerán abiertos, uno en cada sentido, se conviertan en
cuellos de botella». Para el ciudadano que emplee su coche
particular, desde Tráfico se ha diseñando una lista de vías
alternativas, que serán, preferentemente, el Passeig Marítim, la
calle Balmes o la Vía de Cintura.
Como ya apuntara el presidente de la EMT, Pedro Àlvarez, el
pasado mes cuando se informó por primera vez sobre esta solución de
tráfico «cada dieciséis segundos pasa un autobús de la EMT por la
Plaça d'España y a la hora se contabilizan entre 60 y 80 vehículos,
en los días de diario». Estos datos, añadió, justifican el que se
priorice el paso de los autobuses por las Avenidas, un lugar por el
que pasa el 90 por ciento de la flota de la empresa.
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