Marian Sandberg y Rafa Velón, junto con sus hijos, son una parte del verano mallorquín muchísimo antes, sobre todo ella, de que otros se apuntaran a la fiesta. Y son parte discreta, ya que no suelen aparecer donde puede haber una foto, verbigracia: puerto deportivo donde se está calebrando una regata de postín, entrega de premios, restaurante de moda, en primera línea, frecuentado por periodistas, etc., sino que procuran vivir tranquilos y, dentro de lo que cabe, apartados del mundanal ruido, repartiendo su tiempo entre el apartamento y el mar, su gran pasión.
Si ayer sorprendimos a la pareja en compañía del hijo menor de ella, Federico, junto con otros amigos de éste, anteayer estuvieron a bordo su otro hijo Joaquín, su novia Paula, y Alejandra, que cada día que pasa está más guapa. «Ya ves "nos dice la madre". Si hubiérais venido, estábamos todos. Hoy sólo somo unos pocos». No se puede decir que hayan iniciado las vacaciones, porque, aparte de que los hijos andan un poco desperdigados por motivos de trabajo, Rafa está volando casi a diario, «por lo que todos coincidimos pocas veces».
De la boda no quiero ni preguntar, pues si ellos no dicen nada al respecto es señal de que no hay nada, señal, a su vez, de que están bien como están.
"¿Es cierto que el 25 veremos desfilando a Alejandra en Tito's?
"Tengo entendido que sí, que será un desfile muy bonito, del que apenas tengo datos. Pero sí, desfilará esa noche.
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