El concejal de Governació en Cort, José Manuel Sierra, confirmó
ayer que el Ajuntament de Palma ha puesto a disposición del juzgado
de guardia todo su material gráfico relativo a los acontecimientos
ocurridos el pasado sábado durante la celebración de la Revetla, en
los que un grupo de independentistas insultaron, escupieron y
lanzaron huevos y otros objetos a las autoridades.
Los hechos registrados en esa celebración son objeto de sendas
investigaciones en el ámbito judicial y administrativo. La Policía
Local dispone de una filmación realizada en el momento de los
disturbios que ya ha sido validada judicialmente. A partir de ahí,
el Consistorio se mantiene a la espera de las investigaciones y
decisiones judiciales que puedan derivarse.
El edil comentó que «ahora estamos pendientes de las
declaraciones, pues al parecer hay al menos ocho personas
identificadas, todos ellos mallorquines, que ahora van a ser
llamadas a declarar». La delegada del Gobierno en Balears, Catalina
Cirer, confirmó que se habían abierto diligencias que calificó de
«rutinarias» para esclarecer los hechos y sancionar a los
culpables, si así lo dictamina el resultado de las investigaciones.
La sanción mínima que puede recaer en los autores asciende a 50.000
pesetas. «Fui testigo de los incidentes y puedo confirmar que los
proyectiles lanzados no sólo fueron huevos, sino también monedas de
distinto valor», explicó.
Por otra parte, un miembro de la organización Red Skins, Joan
Perelló, de 22 años, que supuestamente participó en el altercado,
negó ayer de forma rotunda cualquier implicación en los hechos. «Ni
quemamos banderas españolas ni arrojamos objetos; se trata de un
malentendido», dijo Perelló. Los Reds Skins forman parte de la
organización mundial revolucionaria «Rash».
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