El Instituto Nacional de Meteorología de Balears registró ayer una temperatura mínima de -3'8 grados en Lluc. El monasterio amaneció, por tanto, con algunas manchas de nieve, que se fundió con los primeros rayos de sol. Donde sí cuajó la nieve fue en el Puig Major, donde había zonas cubiertas totalmente de blanco.
Los habitantes de los alrededores no se abalanzaron a ver ni a jugar con el blanco elemento, tal vez porque, aunque esta sea la primera nevada del siglo, no lo es de este invierno, que ya ha pintado de blanco la Tramuntana. Algunos de los pocos vehículos que circulaban por la zona nevada tuvieron que lamentar pequeños accidentes, fruto del mal estado de la calzada, que estaba mojada y, por tanto, muy resbaladiza.
Según comentaron fuentes del Instituto Meteorológico, en estos días las temperaturas son ligeramente bajas (las mínimas registradas ayer fueron 5'2 en Portopí; 2 grados en sa Pobla; 2'5 en Pollença o 0'7 en Porreres) aunque se mantienen en los márgenes de las temperaturas mínimas medias del instituto que se sitúan en 5'3 grados centígrados en el mes de febrero.
Las fuentes del instituto sí remarcaron que han bajado las temperaturas máximas respecto a las máximas medias que controla este organismo desde su creación en la Isla. Estas máximas se sitúan en 15'8 grados en el mes de febrero. Así, el domingo, la máxima del observatorio de Palma-Portopí fue de 10'4 grados y ayer, de 11'6 grados centígrados, entre cuatro y cinco grados de lo habitual.
A partir de hoy, siempre según la información del Instituto, se espera que el tiempo empeore: temperaturas más bajas, tormentas y presencia de nieve a partir de los 1.000 metros de altura.
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