J.F.MESTRE23/03/01 0:00
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La juez del Juzgado de Instrucción número 5 de Palma aplazó ayer la declaración del empresario turístico José Forteza Rey, quien había sido citado como imputado en la investigación del denominado «caso Tívoli», el derrumbe de un hostal que provocó la muerte de dos trabajadores. Este aplazamiento se produjo al plantearse el problema de que Forteza Rey estaba citado como imputado, pero al mismo tiempo la juez había aceptado su personación como acusación particular.

El empresario turístico explicó ayer que esta tragedia le ha hecho mucho daño a su prestigio, aunque aclaró que ello no puede compararse con el dolor que sufren los familiares de las víctimas. Forteza Rey, que está representado por el abogado Manuel Pomar, explicó que él no dirigía la obra y que cedió toda la responsabilidad a «los técnicos que contraté». Explicó que cada semana visitaba el desarrollo de las obras y se entrevistaba con el constructor, el aparejador y el arquitecto. «Tras cada visita les hacía firmar un acta». El promotor explicó que el constructor tenía contratado un plan de seguridad con una empresa, y que cada semana se analizaban las condiciones de los empleados.

Explicó también que «no me siento culpable de que se hubiera caído el hotel porque autoricé muchas veces al constructor que aumentara el presupuesto para reforzar la estructura del edificio». El promotor quiso aclarar que la licencia turística de este hotel no estaba anulada «sino sólo paralizada». El proyecto era construir un hotel de dos estrellas, con 105 plazas, y a los dos años aumentar su categoría. «Buscábamos un proyecto de hotel familiar, con pocas plazas y un buen servicio, un modelo que ya casi no existe en Mallorca». Forteza Rey consideró que era lógico que su empresa estuviera promocionando el hotel Tívoli a través de Internet «porque las plazas hoteleras siempre se venden por adelantado», y explicó que el proyecto era terminar la obra antes de este verano.

El empresario no quiso cuantificar la pérdida económica que le ha supuesto la caída del hotel Tívoli, aunque aclaró que ha encomendado este trabajo a una empresa.