Llorenç Cerdà «Ramis», se estrenó como músico de la Banda de Porreres con doce años. Era un mes de abril de 1929 en las fiestas del santuario de Monti-sion. De esto hace setenta y dos años y su bombardino sigue sonando en los conciertos de la Philarmònica. Su amor por la música le ha convertido en uno de los músicos de la Isla que más años lleva en activo. «Ahora sólo puedo tocar sentado, ya no puedo desfilar», explica Llorenç.
Gracias a la música ha tocado en las fallas de Valencia, dos veces en el mítico programa de televisión «Gente Joven», en las fiestas del Corpus de Barcelona y en todos los pueblos de Mallorca. Además, cuenta orgulloso que su destreza en hacer sonar la corneta le permitió no tener que empuñar arma alguna durante el año que estuvo en el Ebro durante la Guerra Civil.
Los 72 años que lleva como componente de la Banda de Música de Porreres le han permitido tocar distintos instrumentos. Primero la corneta, después el trombón y por último el bombardino. Llorenç enseña con orgullo su bombardino porque «lo llevo tocando 45 años». En referencia a este instrumento afirma que al principio eran dos en la banda pero desde hace cuatro décadas es el único bombardino. «Supongo que es porque es un instrumento muy grande y nadie quiere tocarlo», explica.
Pero hace unos meses un joven porrerenc le dio una gran alegría al comunicarle que quería aprender a tocar el bombardino. «No afluixis», le dijo Llorenç, «es un valiente, estoy muy contento de tener un sustituto. Hubo un tiempo en que pensé «Meam si no n'hi haurà cap que em rellevi».
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