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El portavoz del Grupo Municipal de Unió Mallorquina en el Ajuntament de Palma, Ferran Trujillo, y el presidente del partido en Palma, Francesc Buils, repartieron ayer por distintas zonas de Palma los dípticos que UM ha editado bajo el lema «PP: 10 anys d'incompliments», en respuesta a la campaña «Ahir, avui, demà. Palma sempre cap endavant. Gràcies per 10 anys de confiança», presentada el pasado mes de mayo por el PP para conmemorar sus diez años al frente de la Alcaldía.

«No nos gusta hacer campañas en negativo, no es nuestra línea, pero frente al atrevimiento del PP hemos tenido que reaccionar», indicó Trujilo, para añadir: «Los años de gobierno no se han de celebrar, lo que hay que hacer es trabajar por el bien de la ciudad, que es la obligación de cualquier político». Trujillo añadió que la campaña de UM es puntual, «hemos querido dar un toque de atención al actual equipo de gobierno», dijo. Para el portavoz nacionalista, la campaña del PP adolece de un exceso de triunfalismo: «Parece como si Fageda lo hubiera conseguido todo cuando lo cierto es que, si bien se han hecho cosas positivas, hay aún muchas necesidades y carencias por cubrir. El PP ha de rectificar su manera de actuar».

«Entre otros problemas, hay un exceso de obras, faltan políticas para la juventud, no se ha resuelto el tema de la prostitución y el Parc de Ses Estacions sigue sin convencer a los ciudadanos», prosiguió. «Si Fageda hubiese hecho un análisis o un balance de su gestión en estos diez años nos habría parecido bien. Pero el alcalde sólo ha celebrado que manda en Cort», resumió finalmente Trujillo.

Por su parte, el teniente de alcalde de Contractació i Govern Interior de Cort, José María Rodríguez, indicó: «Hemos hecho una campaña humilde, de agradecimiento a los ciudadanos, analizando lo bueno que se ha hecho en Palma y lo que aún queda por hacer en los próximos años», para añadir: «Seguiremos trabajando para mejorar Palma, labor que han de llevar a cabo el actual equipo de gobierno y la oposición, ésta presentando propuestas constructivas y no contrapropuestas». «UM está acostumbrada a ir a la contra», concluyó.