La dirección del aeropuerto de Palma cerrará Son Sant Joan en el
momento en que las 80 posiciones de aparcamiento de aeronaves que
existen en la plataforma de estacionamiento queden cubiertas en el
transcurso de la huelga convocada por los sindicatos en el
transporte discrecional por carretera, prevista para los días 29 y
30 de junio y 1 de julio, según ha señalado el director de Son Sant
Joan, Mariano Menor, al sector turístico, dentro del plan de choque
que se está estudiando para paliar los efectos de esta huelga con
el fin de no repetir las imágenes de miles de turistas durmiendo en
los módulos del aeropuerto.
Esta decisión de AENA-Palma fue dada a conocer ayer en la
reunión que mantuvo el sector turístico en el hotel Valparaíso de
Palma, que contó con la presencia de Mariano Menor, así como
representantes del Fomento del Turismo de Mallorca, la patronal de
agencias de viajes Aviba, la Asociación del Transporte
Discrecional, Federación Hotelera de Mallorca y touroperadores. El
sector confía que los contactos que va a mantener el Govern con los
sindicatos la próxima semana, «logren paliar la huelga, dado que en
caso contrario se producirá un daño de imagen irreparable para las
Islas».
Todas las patronales reunidas ayer esperan, sin embargo, el
resultado de las consultas que el Govern está haciendo con las
partes en conflicto sobre la declaración de servicios mínimos,
«pese a todo, hemos decidido por unanimidad avisar a los
touroperadores y compañías aéreas para que adopten las medidas
alternativas posibles para que puedan evitar los efectos de la
huelga, que podría obligar a AENA-Palma a cerrar el aeropuerto si
se acumulan demasiados aviones en la plataforma o hay demasiadas
personas dentro de las terminales», indican las patronales en un
comunicado remitido ayer por el Fomento del Turismo de Mallorca a
los consellers d'Turisme, Treball y Transports. AENA-Palma, dentro
de estas medidas de choque, habilitará el Módulo A del aeropuerto
como sala de espera para los turistas que se vean afectados y no
tengan hotel.
Para evitar la incidencia de la huelga en el ámbito turístico,
Aviba ha planteado a los touroperadores y compañías aéreas que en
caso de huelga, «desvíen vuelos o los cancelen para evitar el caos
en los aeropuertos de las Islas, pero en concreto en Son Sant Joan
donde se espera un movimiento de 300.000 pasajeros durante las tres
jornadas de huelga». La patronal del transporte discrecional, según
su presidente Jaume Batle, «no quiere un paro, de ahí que pedimos
la mediación de la Administración autonómica para garantizar,
mediante los servicios mínimos, el derecho de los viajeros a ser
trasladados a sus hoteles desde el aeropuerto y viceversa». Batle
califica de «poco dialogante, intransigente e injusta la postura de
los sindicatos y lamentamos la inoportunidad de las centrales
sindicales al plantear esta discusión del convenio en plena
temporada turística».
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