La procesión en Palma se realizó con una imagen recién restaurada. Foto: PERE BOTA.

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Las fiestas en honor de la Mare de Déu del Carme concluyeron ayer en Palma con una eucaristía y con una procesión con la imagen restaurada de la Verge. De esta forma, finalizaron en Mallorca los actos de celebración de las festividad del Carme, que se celebraron también en Sóller, Porto Cristo, Andratx, Pollença y en la barriada palmesana del Coll d'en Rabassa.

En Palma, el mal tiempo se erigió en el protagonista negativo y obligó a suspender uno de los actos previstos, la misa en la Estación Naval de Portopí. Asimismo, la lluvia, que durante gran parte del día cayó sobre la ciudad, restó afluencia de público, aunque el alcalde Joan Fageda sí estuvo presente.

La procesión de la Verge del Carme se celebró en Sóller como es tradicional, durante la noche del domingo. La imagen de la Verge fue llevada en barco por la bahía, aunque la travesía quedó deslucida, según algunos vecinos, por la escasa colaboración del sector hotelero. Años atrás, los hoteles solían apagar todas las luces para realzar las embarcaciones iluminadas de la procesión, pero en los últimos tiempos han dejado de seguir esta costumbre.

En Porto Cristo no se supo hasta última hora si se celebraría la procesión de llaüts y demás embarcaciones a causa de la persistente lluvia. Finalmente escampó y el acto se celebró aunque con menor participación. En Andratx la invitada de honor fue Maria Antònia Munar, presidenta del CIM, que asistió a la procesión marítima en honor de la patrona de los pescadores.