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J. MESTRE/N. DOMBLÀS Las medidas urbanísticas que ha aprobado el Govern hasta la fecha han supuesto una reducción en la capacidad de población potencial de 380.000 habitantes, según figura en la documentación que acompaña tanto a la reforma de las Directrices de Ordenación del Territorio como al proyecto de ley del suelo. Estos dos textos serán analizados casi con toda seguridad en la reunión que mantendrá el Ejecutivo mañana viernes. Como ya adelantó el 28 de abril de este mismo año, la reforma de las Directrices incorpora una disposición para fijar cupos anuales de licencias al año. Un día más tarde, este periódico también informó de que UM no estaba dispuesto a votar de momento a favor de esta disposición. Los representantes de UM han ido anunciando estos días su oposición a alguna de las propuestas del Govern, si bien hasta que el Ejecutivo no las apruebe no habrá un pronunciamiento oficial.

Ultima Hora

Por lo que respecta al impacto de las medidas aprobadas hasta ahora por el Ejecutivo, la moratoria para edificar en las parcelaciones en suelo rústico ha impedido la construcción de 252.000 nuevas plazas, a las que se suman las más de 100.000 plazas que no se podrán edificar tras eliminar las excepciones a la parcela mínima de 14.000 metros. La modificación de la Ley de Espacios Naturales para impedir la edificación en las Areas Naturales de Especial Interés (ANEI) ha limitado la construcción de 6.000 nuevas plazas, y la imposibilidad de edificar en la franja de 500 metros de amplitud de la costa ha impedido la construcción de 5.000 nuevas plazas. A todas estas medidas se suman las 17.000 plazas que no se podrán construir en un total de 13 sectores urbanizables.

Hay que tener en cuenta además que las sucesivas moratorias del Consell de Mallorca han dejado congelada la posibilidad de construir unas 350.000 plazas, según las estimaciones realizadas por los responsables de Urbanisme del Consell. A todas estas medidas habrá que añadir las que el Ejecutivo estudiará en su reunión de mañana y que tienen como propuesta más revolucionaria la programación temporal de ejecución de licencias relativas a edificios de uso residencial o turístico en suelo urbano.

Con la reforma de las Directrices de Ordenación del Territorio y la aprobación de la ley del suelo, el Govern quiere adecuar la legislación a las disposiciones incluidas en el Pacte de Progrés relativas a la contención de la construcción y al establecimiento de un modelo de crecimiento sostenible. Con la modificación de las DOT se pretende además asignar las funciones de ordenación territorial a los consells, de acuerdo con la Ley de Ordenación del Territorio y con el traspaso de competencias en esta materia. También se incluyen medidas para la reducción de la capacidad de población en suelo rústico y urbano. Se pretende, por último, consolidar y reforzar el papel de los ayuntamientos y de los consells a las dinámicas de protección del territorio.