El Ministerio de Sanidad está tramitando un decreto, que desarrolla
un artículo de la Ley del Medicamento de 1990 y derogará una orden
de 1973, sobre la venta de plantas medicinales. A través del citado
decreto, el Gobierno central pretende ordenar el mercado,
escasamente regulado hoy en día, de los herboristas y la venta de
plantas medicinales. Farmacéuticos y herboristas se disputan, en
todo el Estado español, la venta de varias especies de plantas
medicinales. Con el decreto se pretende regular la situación,
aunque desde las herboristerías se teme que con esta regulación
sólo se beneficie a las farmacias.
De hecho desde la 'Herboristeria La Mallorquina' de Palma se ha
reconocido que «de momento sólo sabemos lo que hemos podido leer en
la prensa. Pero lo cierto es que estamos hablando de una vieja
lucha entre los farmacéuticos y nosotros», explican y añaden que
«antes se tenía la concepción de que las plantas medicinales casi
no se vendían, pero ahora que está más de moda, los farmacéuticos
han descubierto que es un buen negocio».
Desde la misma herboristería comentan que «una de las plantas
que más se vende, el hipérico o hierba de San Juan, ha llegado
incluso a superar las ventas de uno de los medicamentos de moda, el
Prozac» y añade que «en 1999 en Alemania se paralizó un poco la
venta de hipérico porque estaba superando al Prozac, y naturalmente
la industria sanitaria no podía consentir perder mercado y dinero»,
explica.
De la misma opinión es la titular de la «Herboristeria Els
Àngels» de Can Pastilla, quien no duda en afirmar que «nosotros
tenemos gente procedente de muchas zonas distintas, extranjeros y
peninsulares, que creen mucho en la curación de las plantas
medicinales. Aunque he oído hablar de este decreto, espero que el
Gobierno central no quiere perjudicar nuestro negocio en beneficio
de las farmacias, todos tenemos derecho a poder vivir de nuestro
trabajo», afirma la herborista.
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