El curso 2001-2002 comenzó ayer para los 82.456 alumnos de Infantil
y Primaria escolarizados hasta la fecha en Balears -frente a los
81.000 del año pasado-, ya que el proceso de matriculación no está
cerrado todavía. La normalidad fue la tónica general, destacada
desde la Conselleria d'Educació, sindicatos, patronales y
asociaciones de padres, excepto para los alumnos de los cuatro
colegios públicos de Mallorca que ayer no pudieron abrir sus
puertas debido al retraso de las obras de reforma que se llevan a
cabo.
Se trata del C.P Joan Mas (Pollença), el centro Es Tamarells
(s'Arenal), C.P Cas Concos y C.P. Es Puig de Sóller. En todos ellos
el regreso a las aulas se aplaza, como mínimo, hasta el próximo
lunes, según se informó a los padres. El nuevo curso ha venido
precedido por las quejas ante la falta de plazas, en especial, para
los alumnos de 3 años, y es que Balears sigue registrando, como ya
ocurriera el año pasado, un incremento de la población escolar por
efecto de la inmigración.
De hecho, en el próximo cuatrimestre desde Educació se espera la
llegada de entre 700 y 800 menores con necesidades de escolarizació
como resultado de los procesos de reagrupamiento familiar. El
director general de Planificació i Centres de la Conselleria, Jaume
Gual, reconoció ayer que aunque la gran mayoría de los maestros
estaban ayer en sus puestos, queda pendiente la adjudicación de 29
plazas de especialistas que deberán cubrirse a lo largo de los
próximos días a partir de la última bolsa de interinos y con
profesores que deberán venir de fuera.
Al respecto, desde el STEI se denunció ayer que la falta de
especialistas de Pedagogía Terapéutica o Audición y Lenguajes es,
ante todo, «culpa de la UIB, porque no oferta estas especialidades
de magisterio para las que hay una gran demanda, y sí ofrece otras
como la de Primaria para las que apenas hay salida profesional»,
apuntó Sebastià Serra.
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