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Alejandro precisa de nuestra ayuda para poder ser operado
Se llama Alejandro Martínez García, nació hace dos años en Lima. Llegó a este mundo con la ilusión de vivir felizmente al lado de sus padres y hermanos. Pero no tuvo mucha suerte. Nació con el Síndrome de Down y con otros problemas que los médicos detectaron. Uno, en el esófago, y otro, en el ano: lo tenía cerrado. Como en aquel hospital no operaban, y él precisaba ser intervenido, pues corría riesgo de morir, fue trasladado a otro hospital. Tras muchos análisis le detectaron el mal: atrofia esofágica y encima precisaba de una colostomía, pues, como hemos dicho, carecía de ano. La operación era, por tanto, obligada. Necesaria. Todo eso ocurría en el mismo día de su nacimiento. La intervención fue un éxito, pero siguieron las complicaciones en aquel pequeño cuerpo que afectaron a su salud. Ahora, con dos años recién cumplidos, tiene que afrontar una nueva operación, ahora en su ano, pero sus padres carecen de recursos y en Perú, sin dinero, no te aceptan en los hospitales, lo cual es un nuevo problema para Alejandro. Por eso Alejandro pide ayuda, a través de Ayne-Perú Trinitarias, Solidaridad y Desarrollo, para poder salir adelante. ¿Por qué no le ayudamos? Es un ruego que hago a todos, a las gentes de buen corazón y en especial a la buena gente de la noche que pocas veces me ha fallado, ni yo a ellos. ¿Qué vale una copa? Pues con eso es suficiente, puesto que muchos pocos hacen un mucho. La cuenta en La Caixa y es: 2100-034598-0200357118. Hora Nova, editora de Ultima Hora ha ingresado ya 100.000 pesetas.

Volvemos a lo de siempre: la basura se deposita en un contenedor, no en la vía pública, y a una hora determinada
Me sabe mal, pero tengo que insistir en lo de ayer. En parte, si la ciudad está sucia es porque la ensuciamos nosotros. Y mientras no cambiemos de mentalidad, por muchos contenedores que nos pongan, siempre habrá basura por ahí, oliendo mal y creando una pésima imagen. Por otra parte, las cajas de cartón deben ser plegadas e introducidas en el contenedor azul, nunca abandonadas en la vía pública. Es más, en esa zona en concreto, EMAYA pasa a buscar los cartones de puerta a puerta a partir de las 8 de la tarde.