La consellera de Sanitat i Consum, Aina Salom, dejó ayer muy claro
que no se asumirán las transferencias sanitarias (el Insalud) si no
hay una partida económica extra para las inversiones previstas,
entre ellas la reforma de Son Dureta y que se ha cuantificado en
unos 18.000 millones. De esta forma, Salom responde a Roberto
Collado, subdirector general de Atención Especializada del Insalud,
quien el miércoles expuso que los 18.000 millones para levantar el
nuevo Son Dureta estarán incluidos en el gasto capitativo (por
habitante) del Insalud y no se prevé partida extra alguna.
Este nuevo gasto capitativo supone que Balears recibirá 102.000
millones anuales. En la actualidad, el presupuesto anual del
Insalud en Balears es de algo menos de 80.000 millones. Sin
embargo, el Govern reivindica una partida extra, a abonar una sola
vez, por toda una serie de obras pendientes como pueden ser la
reforma de Son Dureta, el Hospital de Inca u obras en diferentes
centros de salud en lo que sólo a Mallorca se refiere. El Servei
Balear de la Salut (Serbasa) "el Insalud balear" había cuantificado
esta partida extra en unos 30.000 millones si bien se hablaba de
que el Govern se contentaría con 20.000 millones.
Salom desautorizó ayer las declaraciones de Collado,
manifestando que «no está en las negociaciones». Salom dejó claro
que «no basta el dinero capitativo» y que las negociaciones con el
Insalud siguen abiertas. De hecho, según explicó la consellera se
les ha pedido que demuestren esta deuda histórica y que el Insalud
está dispuesto a negociar. «No se asumirán las competencias sin una
partida extra de inversión. Vamos a demostrar que hay todos unos
gastos al margen del gasto capitativo», aseveró la consellera. En
principio, está previsto que Balears, y el resto de comunidades
autónomas, asuman las transferencias sanitarias en el primer
trimestre del próximo año.
Aina Salom también se refirió a la macroreforma de Son Dureta
anunciada por Roberto Collado. Al respecto, apuntó que como
proyecto le parece estupendo pero dejó claro que «estamos cansados
de proyectos que finalmente no se realizan y lo que necesita el
ciudadano de Balears son realidades». Y es que este nuevo plan
director para Son Dureta no es el primero y cuando sea una realidad
llevará una demora próxima a los quince años. En otro orden de
cosas, la titular de Sanitat i Consum del Govern anunció que se
está trabajando con el Colegio de Farmacéuticos de Balears para
poner en marcha el sistema de unidosis de medicamentos
(dosificación individual) con el objetivo de poner freno al gasto
farmacéutico y hacer un mayor seguimiento del cumplimiento por
parte del paciente de la medicación. De momento, no hay fecha.
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