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Los ataques terroristas del 11 de septiembre han aumentado los niveles de estrés entre los estadounidenses, muchos de los cuales buscan en el sexo alivio para su presión. El psiquiatra Lipsius Steven, que ejerce su profesión en Washington, afima que «hechos tan terribles como los ocurridos hace cuatro semanas en Nueva York y Washington traen a la superficie los temores y las ansiedades de todos». «En una situación así son muchas las personas que reflexionan sobre qué es lo realmente importante en sus vidas, que aprecian las relaciones que tienen y buscan el apoyo y el consuelo en otros», agregó.

La opinión del doctor Steven es compartida por sus colegas de Mallorca. Puestos en contacto con varios psiquiatras que ejercen su profesión en Palma estos reconocen que, tras hechos como los ocurridos el día 11 de septiembre, se pueden desatar los instintos más primarios. El psiquiatra Amador Calafat ha comentado a Ultima Hora que «inicialmente, cuando se produce una situación de ansiedad o de estrés, la primera reacción suelo ser de inhibición, pero es posible que, con el paso de los días aumenten las relaciones sexuales en busca de apoyo y consuelo».

Para la doctora Carmen Hidalgo puede ser cierto que aumenten las relaciones sexuales, «aunque es una cuestión que se tendría que estudiar con profundidad, creo que es posible que se dejen llevar por el temor y la situación de desastre», añade la psiquiatra. «Naturalmente que es posible que aumenten las relaciones sexuales después del ataque contra las Torres Gemelas de Nueva York. Basta ver una película de guerra en las que suelen abundar las escenas de sexo, sería algo así como disfrutar de la vida ante el riesgo de perderla», afirmó el psiquiatra Antonio Rifa.

Por contra, para el psiquiatra Tomás Blanes «el aumento de la actividad sexual tras los atentados del 11 de septiembre no tiene por qué estar ligado a un aumento de la libido», de hecho, según Blanes, «las personas que han sufrido el atentado, quienes estaban en las torres o en sus inmediaciones deben sufrir un estrés post traumático lo que hará que su interés sexual disminuya». Pero este no sería el caso de la gente que «no ha sufrido directamente el atentado. Esta gente al salir menos posiblemente puede ver aumentada su actividad sexual, al igual que se practica más el sexo en vacaciones», apunta Banes.

De hecho, un artículo publicado por el diario «The Washington Times» señala que muchas personas en este país, "que ha sufrido el primer ataque contra la población civil en su propio territorio" experimentan «un ímpetu libidinoso». Según los expertos en salud sexual, «se trata lo que se llama sexo por 'terror' o posdesastre». Joseph Miller, cardiólogo de la Escuela de Medicina de la Universidad Emory en Atlanta (Georgia), dijo que «sin duda la gente lidia con el estrés de maneras distintas». «Todos necesitan mecanismos para lidiar con el estrés» agregó Miller.