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Se llamará Catalina... que ya toca
Catalina Cicer, delegada de Gobierno, dio a luz a mediodía de ayer. Fue niña, a la que llamará Catalina, «que ya toca». La acompañó en el parto su marido, Martín, que no podía disimular su felicidad. «Esta mañana me he levantado muy tranquila, aunque notaba que la cosa se ponía en marcha, pero no me ha impedido que acompañara a las niñas al colegio y luego que me tomara el cafetito de cada día. A media mañana, como la cosa ha ido más en serio, he llamado a Martín y nos hemos ido a la clínica y... Bueno, pues aquí estamos. Ya somos cinco en la familia. ¡Y mayoría, eh!», aclara. «¡Y que me lo digan a mí! con mujer, dos hijas y cuatro nietas», replica el padre de Catalina. De repente Catalina se golpea la frente y llama la atención a su esposo que no para de dar la noticia de la buena nueva a amigos y familiares a través del móvil. «¡Ostras, Martín! Llama enseguida a Garro, del Mallorca, y que dé de alta de socia a la niña». Porque Catalina es genio y figura incluso en ese trance, lo cual no me extraña, puesto que una mujer que es capaz de vestirse con el uniforme del Mallorca en la recta final de su embarazo con motivo de la final de Copa del Rey contra el Barça, lo normal es que cuando nazca la criatura la haga socia del equipo.