En la madrugada del pasado sábado se celebró en la discoteca Tito's la cuarta edición del concurso de Miss Gordi, que tuvo novedades respecto a los años precedentes, puesto que en esta ocasión fueron elegidas miss Elegancia y miss Simpatía.
En total se presentaron doce candidatas al título femenino de la talla XXL. Mujeres sin complejos, simpáticas y adorables, que individual y colectivamente desfilaron ante el jurado y público que abarrotaba la sala en tres ocasiones. Había que verlas al pasar, sonrientes y con ganas de agradar, como si lo de desfilar lo hubieran hecho toda la vida.
Se trataba de elegir a la mejor, a la más completa, no sólo por su peso, sino por el saber lucir las prendas y desenvolverse sobre el escenario. Tras la deliberación, el jurado otorgó el título de Miss Gordi 2001 a Begoña Bueno, de 27 años de edad y de 105 kilos de peso, a quien se le entregaron 150.000 pesetas en metálico, un viaje para dos personas a Galicia y una escultura de «gordi», obra de Amy Girad, muy parecida a las de Botero. Begoña es de Castellón, es administrativa, vive en Palma desde hace dos años, tiene pareja estable y "cuenta" se presentó al concurso de Miss Gordi «para reivindicar un poco a las chicas de la talla grande».
El título de Miss Simpatía recayó en Isabel Lozano, de 23 años de edad y 106 kilos de peso, mientras que el de Miss Elegancia se lo llevó Cristina Campillo, de 25 años de edad y 96 kilos de peso.
En el transcurso de la elección actuaron el magnífico humorista Eric Boo y el no menos fantástico ballet de Tito's.
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