Tendremos que convenir en que gracias al euro los decimales
volverán a tener la importancia y significación que poseyeron
cuando estudiábamos en la EGB el número «pi» "3'1416" o el
resultado de dividir, por ejemplo, 15 entre 20 "0'75". Importancia
y significación que nunca deberían haberse perdido. Para rememorar
las entrañables operaciones aritméticas que llevábamos a cabo en
las clases de matemáticas de nuestra más tierna infancia podremos
entretenernos estudiando los recibos de las diferentes empresas que
nos suministran, entre otros servicios, gas y electricidad, línea
telefónica o agua, como ocurre en el caso de EMAYA.
Hay que reconocer que en la empresa municipal de agua y
alcantarillado los decimales ya juegan ahora, y a pesar de las
últimas subidas, un destacado papel. Pensemos, por ejemplo, en la
cuota fija "642'60 pesetas" o en la cuota proporcional "118'80
pesetas" de la tarifa del agua. Nada que ver, pese a todo, con los
3'8621 euros y los 0'714002 euros que costarán dichas cuotas,
respectivamente, a partir del 1 de enero. La cuota fija de la
tarifa de recogida y eliminación de residuos sólidos urbanos pasará
de 784 pesetas "¡ojo!, sin decimales" a 4'7119 euros.
La cuota proporcional pasará de 13'90 pesetas a 0'0835 euros.
Por último, la cuota fija de la tarifa de alcantarillado pasará de
110'30 pesetas a 0'6629 euros, y la cuota proporcional de 35'90
pesetas a 0'2158 euros. A la vista de estas cifras, parece
conveniente disponer no sólo de un buen euroconversor, sino también
de una calculadora capaz de recoger hasta las cantidades más
diminutas. En último extremo, siempre podrá recurrirse a los hijos
o a los sobrinitos que se encuentren en edad escolar para intentar
descifrar, conjuntamente, los recibos que nos esperan a partir de
ahora.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.