Los socios de UM rechazan ampliar la planta incineradora

La propuesta de UM está todavía abierta, pero ha sido suficiente para que dos de los partidos del Pacte ya hayan dicho que no están de acuerdo con la ampliación de la planta de Son Reus. La presidenta del Consell de Mallorca, Maria Antònia Munar, aseguró ayer que no se ampliará la planta esta legislatura sin el consenso de todos los partidos políticos. En una postura similar a la que UM defiende con el segundo cinturón, la presidenta aseguró que en un breve plazo de tiempo, aunque no sea en esta legislatura, la planta deberá ampliarse: «La realidad es cabezona y se acabará haciendo la ampliación». Munar reconoció que, si no se actúa ya y no se toma una decisión en un breve plazo de tiempo, «de aquí a dos años tendremos un problema grave».

Sin embargo, dada la oposición de los socios del Pacte, la solución más probable será la construcción de un depósito de seguridad donde instalar las miles de toneladas de basura que han aflorado con el tratamiento de los residuos de demolición. Este aumento, junto con el notable incremento de la población, ha hecho que los actuales sistemas de tratamiento de residuos no sirvan para tratar la totalidad de las basuras.

La portavoz de EU en el Consell, Marilena Tugores, fue las más contundente en su rechazo. Lamentó que su formación era la única que no estuvo presente en la reunión y dejó claro que no aceptarán una ampliación de la planta incineradora y pidió más información para presentar una propuesta alternativa. Su socio de coalición, Miquel Angel Llauger (EV) señaló que la mejor opción es la construcción de un vertedero de seguridad con todas las garantías de sellado para evitar problemas. Añadió que este es el mejor sistema para eliminar los residuos que han surgido al tratar los de demolición, pero que no son escombros.

Bernat Aguiló, que asistió a la reunión en nombre del PSM, reconoció que se trata de una realidad «dura» y de un problema que habrá que afrontar «porque es la realidad que existe en este momento». Añadió que parece claro que ya no se puede reciclar más y admitió que la única opción que queda es incinerar o construir un vertedero. Para Aguiló, la mejor opción es aprovechar los escombros y otros materiales para regenerar los espacios degradados.

Para la consellera del PSOE Mercè Amer, en la reunión quedó abierta la posible solución "tanto a través de la ampliación como del vertedero" pero lo más probable es que se construya finalmente el depósito de seguridad. Amer pidió «valentía» para resolver de una vez por todas un problema que se arrastra desde hace años.

El Pacte no rechaza de forma expresa la ampliación de la planta
«Se aprobará una ley de residuos que establezca el mecanismo de transición necesarios para pasar del actual modelo, basado en la incineración (...) priorizará la reducción en origen, la reutilización y el reciclaje de los residuos y planteará sistemas de tratamiento y competencias tanto en cuando a los residuos sólidos urbano (RSU) como a los tóxicos y peligrosos, voluminosos y ruinas, con el objetivo de minimizar al máximo posible la incineración». Este es el acuerdo textual al que llegaron los partidos del Pacte en 1999. En ningún caso niega de forma expresa la posibilidad de no ampliar la incineradora. Sin embargo, la presidenta del Consell y de UM aseguró ayer que su partido cumplirá lo pactado y no propugnará una ampliación de la planta incineradora si los demás partidos no están de acuerdo. El conseller de Medi Ambient i Natura, Miquel Angel Borràs, aseguró que el espíritu de esta disposición recogida en el acuerdo programático pasa por no ampliar la planta incineradora. Los partidos del Pacte tienen previsto mantener nuevas reuniones la próxima semana para tratar de cerrar la propuesta de tratamiento en un plazo no superior a los dos meses, para que esté construido en dos años.