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GESA-Endesa redujo a 3 los 4.000 supuestos casos de inseguridad en los cambios de tensión de 125 a 220 voltios promovidos por la compañía eléctrica mallorquina. La patronal Asociación de Empresarios de Instalaciones Eléctricas y de Telecomunicaciones de Mallorca (Asinem) denunció ayer en una rueda de prensa que hasta 8.000 usuarios de GESA podrían verse afectados por cambios de tensión con graves fallos de seguridad, de los cuales, la mitad se ha realizado «sin control alguno». Por ello, el presidente de la patronal, Carlos Moyà, anunció que estudian la posibilidad de poner el tema en manos de la Fiscalía de Balears.

Los instaladores afirman que «desde hace años» vienen constatando, a través de denuncias que de forma reiterada vienen realizando los empresarios de instalaciones eléctricas autorizados e integrados en la misma GESA-Endesa, con el beneplácito de la Conselleria de Comerç i Industria, que «se procede al cambio gratuito de 125 a 220 voltios con fallos de seguridad». GESA negó ayer ese extremo y redujo a 3 los casos. «Nuestra compañía costea ese cambio de tensión, siempre bajo estrictos controles de calidad y seguridad».