TW
0

El administardor diocesano de la Iglesia de Mallorca, Andreu Genovart, declaró ayer que «es posible que para octubre tengamos un nuevo obispo». Nombrado administrador diocesano el pasado miércoles por el Colegio de Consultores, Genovart agradeció «la confianza de la Nunciatura y al arzobispo de Valencia por permitir que sigamos nosotros con el gobierno de la Diócesis, sin nombrar a nadie de fuera».

Según reveló, en la conversación que mantuvo con el nuncio de la Santa Sede en España, «no me sorprendería que tuviéramos un nuevo obispo después del verano». «Me dijo: 'Os voy a mandar un buen obispo'», que esperemos, además, «que conozca bien nuestra realidad y, a ser posible, nuestra lengua», dijo.

Ante la posibilidad de que el nuevo prelado sea mallorquín, Genovart explicó que «depende de la Santa Sede, que suele ser muy reservada a la hora de consultar los nombres que baraja». De todas formas, reconoció que es difícil porque «hace años que no se hacen obispos de Mallorca». El único que existe es el obispo de Guamachuco, en Perú, mossén Sebastià Ramis, franciscano de la Tercera Orden Regular.