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Los conductores que recorran algunas de la carreteras de Balears este verano notarán algo menos de tráfico, ya que unos 5.000 coches de alquiler permanecerán inmovilizados debido al cierre de las empresas que estacionan los vehículos en suelo rústico, y la caída de la demanda. Así y todo, según confirmaron ayer Ramón Reus y Manuel Jiménez, presidentes de las patronales Agrupación Empresarial de Alquiler de Vehículos de Baleares (Aevab) y Zonturent (de ámbio nacional), unos 45.000 coches de alquiler circularán en Balears.

La guerra abierta entre «legales», que estacionan los coches en naves industriales) y los «ilegales», que lo hacen en suelo rústico, vivió ayer otro episodio de tensión al convocar ambas partes sendas ruedas de prensa con una hora de diferencia. Los «ilegales» reclamaron a las instituciones competentes que faciliten «soluciones alternativas al cierre de sus instalaciones» e insistieron en proponer la creación de un polígono para todo el sector.

Las ocho empresas agrupadas en la asociación Transcar, que gestionan unos 8.000 vehículos cuyos depósitos se encuentran en la zona conocida como Son Fangos, hicieron un llamamiento a la resolución del conflicto ante el cierre decretado para tres de ellas (dos empresas de Ultramar Express y Record), que tiene como fecha límite el próximo día 24.