El presidente de AECA, Felipe Navío, puso de manifiesto la
preocupación existente en las compañías aéreas por las
repercusiones económicas y de imagen que se van a derivar de esta
huelga. «Los primeros perjudicados van a ser los pasajeros por una
pugna de intereses corporativos que no están justificados y que
afectarán a todos. Balears será, en este sentido, la gran
perjudicada, más en concreto el turismo familiar, que por
conflictos pasados ha optado ya por desviarse a otros destinos
vacacionales. Esta huelga ahuyentará de forma definitiva al turismo
familiar de Balears e incidirá, aún más negativamente en su imagen
turística por una huelga que no tiene justificación alguna».
AECA condena públicamente la huelga de controladores y exige al
Gobierno y sindicatos una negociación para buscar una solución y
estabilidad. Felipe Navío indicó que la actual temporada turística,
marcada por las ventas de último momento, «puede verse perjudicada
seriamente, puesto que afectará a todas las reservas de último
momento, que es la dinámica que está sustentando este año la
evolución del flujo turístico.
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