Fernando Villalobos, director del Institut Laboral de les Illes
Balears (ISLIB), apuntó ayer la necesidad de crear un foro de
debate sobre el acoso moral (mobbing) similar al Observatorio
promovido por el Gobierno vasco y el Consejo vasco de la Abogacía,
en el que se trate el aspecto jurídico y social del acoso moral en
la empresa, y a través del cual se pueda hacer un seguimiento
fiable del acoso psicológico en el trabajo.
Las declaraciones fueron realizadas durante la jornada sobre el
acoso moral en la empresa, organizada por la Conselleria de Treball
i Formació. En la misma, se puso de manifiesto que en Balears no
hay datos fiables sobre emobbing, aunque «se podrían haber
producido en torno a las 30 ó 40 denuncias», aseguró Fernando
Villalobos.
Definir jurídicamente un concepto específico que recoja lo que
en su día fue descrito por Heinz Leymann como 'una situación en la
que una persona o grupo de personas ejercen una violencia
psicológica extrema, de forma sistemática, durante un tiempo
prolongado, sobre otra persona en el lugar de trabajo', es algo que
para Manuel Velázquez, responsable de la Inspección de Trabajo y
Seguridad Social de Vizcaya y uno de los ponentes de la jornada,
puede incluso «aliviar las penas», que en este momento oscilan
entre los 3.000 y 90.000 euros de multa. Manuel Velázquez aseguró
que es «mejor subsumir emobbing a través de las normas ya
existentes. Aplicar la ley». Velázquez insistió en la actuación a
través de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, así como en
la aplicación de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales:
«Aspecto absolutamente novedoso que va a traer consigo importantes
ventajas respecto a la mera aplicación de las normas clásicas del
derecho laboral, ya que nos va a permitir situar el acoso moral en
su verdadero contexto: los riesgos psicosociales, fuente de estrés
y siniestralidad laboral», afirmó.
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