La apertura del curso, que se celebró con el ceremonial tradicional, se inició con el desfile de catedráticos y profesores. Foto: S. CASES
El rector de la Universitat de les Illes Balears (UIB), Avel.lí Blasco, abrió ayer el curso académico con el anuncio de «una gran reforma» que plantea como primer objetivo conseguir una enseñanza «más creativa» en la que la función del profesor será la de «enseñar a pensar». Lo que se persigue con esta reforma, explicó el rector, es pasar del modelo de «clase magistral», en que el enseñante desarrolla en el aula el temario y el alumno recoge sus explicaciones, a un sistema basado en «incentivar la reflexión autónoma» del estudiante mediante el incremento de las prácticas, las tutorías y los trabajos externos.
La sintonía entre la UIB y el Ejecutivo es total en este aspecto. También Jaume Matas aludió al «carácter abierto» que debe tener la Universitat y destacó que tenían como «objetivo común» hacerla «más atractiva». De hecho, y en este punto hizo especial incidencia el rector, las cifras universitarias de Balears no son del todo halagüeñas si se comparan con otras comunidades y otros países de Europa. Blasco destacó que las cifras «no nos hacen sentir satisfechos». Así, indicó que mientras que en el conjunto del Estado, un 44% de la población de entre 18 y 24 años está matriculado, el índice sólo alcanza un 24% en Balears. El rector aludió, en este sentido, a la comisión mixta creada entre el Govern y la UIB para hacer atractiva la Universidad entre el alumnado de los institutos. Avanzó «un plan de choque» para el fomento de los estudios universitarios. Aunque el plazo de matrícula continúa abierto, unos 14.500 alumnos cursarán este año sus estudios en la UIB, según la información facilitada ayer.
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