El tradicional belén de Sant Antoniet, situado en la calle Sant
Miquel, de Palma, fue inaugurado ayer y estará abierto al público
hasta el próximo 6 de enero. En esta ocasión, de los cambios
realizados por la Associació de Betlemistes Francesc Rosselló de
Balears destaca la «cueva» del nacimiento y dos nuevas cascadas de
agua, así como un mayor espacio en un paisaje con gran parecido a
la Serra Nord de Mallorca.
Desde los años 80, el belén de Sant Antoniet puede ser visitado
en el patio del claustro, aunque anteriormente este nacimiento con
figuras realizadas en Olot ya se montaba en la sucursal de es Born
del Banco de Bilbao. En la actualidad se ha aumentado el número de
figuras, algunas de ellas con 80 centímetros de altura, y se han
recuperado otras de gran historia. Los materiales que se utilizan
para realizar la enorme maqueta, principalmente, son maderas y
corcho. En arbustos se aprecian olivos y ramas de tomillo, además
de liquen en sustitución del musgo, que está prohibido. Ovejas,
mulas, perros, caballos, gallinas, etc., componen el grupo animal
del belén, que puede ser visitado a diario entre las 10 y las 13.30
horas y desde las 17 hasta las 20 horas.
Grandes y pequeños podrán realizar un recorrido donde figuras en
movimiento dan vida a un nacimiento lleno de detalles. El belén
contó con la bendición del sacerdote Llorenç Riera y la asistencia
de la vicepresidenta del CIM, Dolça Mulet; del director de zona de
Palma del BBV, Alfons Rengel; el director de la sucursal bancaria
de la plaza del Olivar, Paco Hernandez; el presidente de la
Asociación de comerciantes de Sant Miquel, Joan Binimelis, y los
autores del belén, Antonio y Andrés Rosselló y José Antonio
Terriente.
J.Aguirre
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